LinkedIn es la mayor red social de profesionales. Tiene como principal objetivo poner en contacto a trabajadores y empresas, ayudándoles a intercambiar conocimientos, ideas y oportunidades.
No se trata sólo de subir un curriculum a Internet. LinkedIn es una herramienta que nos puede ayudar a mejorar nuestra reputación online.
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Breve Historia
LinkedIn empezó a fraguarse en la casa de Reid Hoffman, uno de sus co-fundadores, durante el año 2002. El resto de creadores fueron Allen Blue, Konstantin Guericke, Eric Ly y Jean-Luc Vaillant. Fue lanzada oficialmente el 5 de mayo de 2003. A finales de ese mismo mes ya habían conseguido sus 4.500 primeros usuarios.
En el año 2008 se lanzó su versión en español.
En junio de 2016, Microsoft anuncia su compra por 26.000 millones de dólares.
Evolución
A lo largo de los años LinkedIn ha experimentado una importante transformación. Al principio, bastaba con tener una cuenta. Después, comenzó a ser imprescindible tener un perfil medianamente digno con una foto y algunos datos sobre nuestra evolución laboral. Actualmente, estar en LinkedIn implica la necesidad de que nuestra página sea lo más detallada posible:
- Un párrafo por cada uno de los trabajos que hemos ocupado.
- En cada uno de ellos, conviene especificar:
- Las tareas desarrolladas.
- Si teníamos o no personas a nuestro cargo.
- Cuáles han sido nuestros logros.
- También es recomendable contar con algún comentario de personas que hayan compartido con nosotros experiencia (compañeros, superiores, clientes, etc.).
Hoy, lo que se pretende básicamente es que cualquier persona pueda ver con detalle todo lo que hemos hecho, para que pueda ponerse en valor nuestra trayectoria profesional. Esto no implica que no se pueda utilizar como forma de contacto, pero no es la prioridad.
Recomendaciones para ser más efectivo en LinkedIn
A continuación, algunas recomendaciones para que nuestra presencia en LinkedIn sea lo más productiva posible:
- Perfil público. Debemos asegurarnos de que nuestro perfil sea público para aumentar las posibilidades de que los reclutadores lo vean.
- Mantener la foto de perfil actualizada. Un perfil sin foto es como un jardín sin flores. Además, no basta con ponerla cuando abrimos nuestra cuenta y olvidarnos después de ella. Es muy conveniente actualizar nuestro perfil con una foto que nos represente como profesional.
- Actualizar nuestra ubicación. Incluyendo nuestra ubicación actual incrementaremos nuestras oportunidades en LinkedIn, ya que apareceremos entre los resultados cuando los reclutadores busquen profesionales en nuestra área.
- Redactar un extracto. Se trata de una de las biografías más completas que cada usuario tiene en Internet, y seguramente la que más veces será leída. Por ello, debemos aprovecharlo.
- Recomendaciones. Pedir una recomendación a algún ex-jefe o antiguo compañero es otra forma más de añadir valor a nuestro perfil.
- No ser “pesado”. En sus primeros años de andadura, se consideraba aceptable enviar mensajes a todos los contactos en LinkedIn. Actualmente, esto puede considerarse spam. Corremos el riesgo de que un porcentaje importante de nuestros contactos decidan “eliminar” la conexión.
Debemos evitar fotos inadecuadas en nuestro perfil
- Actualizar constantemente nuestro perfil. No sólo nos referimos a la fotografía, sino también a todo aquello que consideremos importante dentro de nuestra carrera profesional y que queramos destacar. Si bien habitualmente se recomienda que un curriculum que vaya ser enviado a un reclutador no tenga más de dos páginas, en LinkedIn esto no es válido. Debemos incluir todo aquello que nos pueda aportar un valor.
- Compartir contenidos. Pueden ser noticias o contenidos propios de nuestra página web o blog, si lo tenemos. También es importante no saturar a las personas que te siguen con varias entradas al día.
- Grupos. Es recomendable unirse a Grupos para estar al día de las cosas relacionadas con la industria que nos pueda interesar.
- Marca personal. Desarrollar una Marca Personal consiste en identificar y comunicar las características que nos hacen sobresalir, ser relevantes, diferentes y visibles en un entorno, competitivo y cambiante. LinkedIn es el sitio perfecto para poner aquellas cosas que puedan contribuir a mejorarla.
- Posicionarse como referente en nuestro sector. La misión de LinkedIn es la de hacer que los profesionales sean más productivos y exitosos en su trabajo, y eso no pasa únicamente por encontrar un nuevo empleo. Hay que empezar por escribir post largos donde expongamos nuestra visión del sector, de las novedades de nuestra industria y compartamos conocimiento con nuestra red.
- Explotar el networking. Si tenemos en mente alguna empresa para la que queremos trabajar, o nos inspiran los pasos de la carrera de alguien en concreto, es el momento de pasar a la acción. Nos podemos poner en contacto con ellos en LinkedIn para que nos cuenten más sobre lo que hay que hacer para entrar en esa empresa o cómo nos puede ayudar esa persona a la que admiramos a tener una carrera similar a la suya.
- Revisar nuestros contactos. Es conveniente que regularmente revisemos bien los contactos que tenemos en nuestra red. Si realmente no nos ha aportado nada el estar conectado con ellos, los podemos eliminar de nuestra lista. Aunque no lo creamos, nuestra red habla mucho de nosotros. Por tanto, es importante cuidar nuestras conexiones.
- Aprovechar el área “Empleos”. Desde ésta, podremos buscar los puestos de trabajo de las compañías que estén ofertando en LinkedIn. También podremos configurar distintas alertas para recibir una notificación en nuestro correo electrónico cuando se anuncie un nuevo trabajo que cumpla con los criterios que hemos seleccionado.
- Exprimir el buscador de LinkedIn. El buscador de LinkedIn es muy potente. Además, algo que no es muy conocido por sus usuarios, es que podemos guardar las búsquedas para acceder posteriormente a ellas, volviéndolas a ejecutar cuando lo necesitemos.