Se aproximan las vacaciones de verano y, como ya es habitual en nosotros, no estamos dispuestos a dejar nuestros dispositivos electrónicos en casa.
Por ello, aunque este periodo suponga que nos tomaremos un descanso, no debemos relajarnos en la seguridad. No olvidemos que es un momento ideal para que los cibercriminales hagan su agosto.
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¿Frente a qué riesgos nos enfrentamos?
Durante esta estación del año nos arriesgamos a que nos roben nuestras cuentas personales o los datos de la tarjeta bancaria, aparte de infecciones por malware, pérdida de información crítica, etc.
Precisamente para evitar sobresaltos, te recomendamos que tomes nota de los siguientes consejos:
Hacer una copia de seguridad de nuestros datos
Es un momento ideal para que realicemos (si no lo hemos hecho ya) una copia de seguridad de todos los datos de nuestros gadgets, ya se trate de nuestro móvil o tableta Android o IOS, como de nuestro ordenador personal (Windows o Mac).
Realizar actualizaciones antes de salir de casa
Antes de salir de viaje es conveniente comprobar que todos nuestros dispositivos electrónicos están actualizados. Estas actualizaciones suelen contener parches o mejoras de seguridad que evitan que seamos vulnerables a ataques.
No publicar en las redes sociales a dónde vamos o dónde estamos
¿Dónde quedaron los tiempos en los que se dejaba una luz encendida o pedíamos a alguien de confianza que subiera las persianas de casa para que pareciera que estuviera habitada en nuestra ausencia?
Esos trucos se utilizaban para evitar que un intruso entrara en casa y, sin embargo, desde que se inventaron las redes sociales, no solo decimos que nos vamos de vacaciones, sino que también hablamos del dónde y del cuándo.
Para evitar que los amigos de lo ajeno tengan la tentación de hacer una visita a nuestra casa, cuantos menos detalles demos en las redes sociales de nuestras vacaciones, mejor.
Evitar conectarnos a redes compartidas
Cuando entramos en un hotel o en una cafetería y preguntamos ¿tenéis wifi?, no somos conscientes de los riesgos que asumimos al conectarnos a una red de Internet compartida:
- Que alguien que está conectado pueda ver toda la información que enviamos o recibimos a través de nuestro dispositivo.
- Que alguien que está conectado pueda acceder a nuestro dispositivo.
- Que alguien que está conectado pueda robar nuestros datos personales.
En el supuesto de que tengamos pocos datos, o estemos fuera de una zona de roaming, hay que ser muy prudente con los lugares a los que accedemos. Es muy recomendable no realizar ninguna compra ni reserva online, ni acceder a nuestras aplicaciones bancarias y, por supuesto, evitar enviar contraseñas o cualquier otro tipo de información que no queramos que nadie sepa.
No descargar aplicaciones que no conozcamos
Cuando necesitemos bajarnos alguna aplicación, conviene hacerlo únicamente desde las aplicaciones oficiales: App Store (Apple) y Google Play (Android).
Cuidado con lo que conectamos a nuestro equipo
Hay que ser especialmente cuidadoso con los dispositivos que podamos conectar a nuestro equipo, especialmente las memorias USB. Las infecciones por USB son tan comunes como antiguas en el mundo del hacking. Por ejemplo, empresas como IBM han prohibido su uso a sus empleados, para evitar riesgos innecesarios.
Activación del doble factor de autentificación, siempre que podamos
Para evitar que nos puedan robar cuentas de redes sociales y emails porque nuestras contraseñas no son seguras, es vital activar el doble factor de autenticación en todas las aplicaciones que tengan disponible esa opción. Este tipo de función implica que alguien que intente loguearse en nuestra cuenta, también necesitará la clave que llega a nuestro teléfono móvil. Así, resultará mucho más difícil que hackeen nuestras cuentas.
Mucho cuidado con los correos electrónicos
Un ejemplo basado en hechos reales consiste en un ataque en el que se envían correos electrónicos a una empresa cuando llega el verano para ver qué emails automáticos contestan. Esto informaría sobre ausencias en determinados puestos de trabajo. Esto da mucha información a los cibercriminales a la hora de preparar un ataque para, por ejemplo, hacerse pasar por alguien de dentro de la empresa.
¿Qué es lo mejor que podemos hacer? No tener estos correos automatizados y que un compañero reciba los emails en tu ausencia.
Otra técnica muy utilizada es la del phishing, o suplantación de identidad.
Mucho cuidado con los enlaces o archivos de descargas
Hay que tener mucho cuidado con los enlaces en los que pinchamos o en los archivos que descargamos. Podrían llevarnos a sitios fraudulentos o contener algún tipo de malware que infecte nuestro equipo.
Esperamos que disfrutes de unas felices vacaciones, bien merecidas y ciberseguras.